Para su campaña navideña Tous ha lanzado un musical que pone de relieve lo difícil que es envolver la famosa caja redonda de la marca de joyas. Lola Mullen Lowe firma la creatividad.
En tono de humor, la actriz Emma Roberts (prescriptora de la marca desde el pasado mes de abril, en sustitución de Gwyneth Paltrow) acompaña al espectador en un viaje navideño a través de un filme dirigido por Belén Gayan. La campaña es una oda a las navidades: felicidad, familia, nieve, lucecitas, una canción pegadiza y por supuesto regalos mal envueltos.
La campaña se ha lanzado el 22 de noviembre en televisión en España, México, Portugal y Rusia, y continuará en medios digitales, exterior y prensa en más de 17 mercados incluyendo a Estados Unidos, Canadá, Polonia, Colombia y Puerto Rico y estará activa durante todas las navidades. UM maneja los medios en nuestro país.
Para dar un comienzo espectacular a esta campaña, en el mes de diciembre la capital de España se despertará con la famosa (y redonda) cúpula de la estación de Atocha convertida en una caja redonda de Tous. Según Anaïs Durand, directora de marketing y comunicación de Tous, “esta época del año es alegría y generosidad. En Tous, la Navidad es tiempo para celebrar todos juntos y encontrar la felicidad al compartir. En nuestra campaña festiva y musical jugamos con la emoción de dar algo especial a alguien que nos importa, sin tomárnoslo muy en serio. Después de todo, el regalo perfecto es el regalo en el que pones todo tu corazón.”
Néstor García y Nacho Oñate, directores creativos ejecutivos de Lola Mullen Lowe, agencia responsable de la campaña, afirman que querían “hacer una campaña muy navideña pero que sólo TOUS pudiera firmar. Cuando compras un regalo y en la tienda te dicen ‘lo siento, aquí no envolvemos para regalo’ empieza un pequeño drama que normalmente termina en chapuza. Cajas con esquinas sin envolver, arrugas estratégicamente ocultas o trozos de celo por todas partes… eso si la caja es cuadrada. Si además pruebas a hacerlo con la famosa caja de Tous, sin bordes claros, sin esquinas y sin pistas de por dónde doblar el papel el drama se convierte en desastre encantador.”