El 31 de diciembre La Casera se fue hasta el pueblo granadino de Bubión para celebrar las campanadas más lentas de la historia. Una iniciativa, creada por la agencia La Despensa, con la que la marca reflexionaba sobre nuestro ritmo de vida e invita a disfrutar con calma de los placeres de la vida. 

‘Las uvas lentas’ quiere que todo el mundo empiece el año más relajado. Así el campanario de este pueblo alpujarreño de 323 habitantes dejó un intervalo de diez segundos entre cada repique para disfrutar, con calma, de las uvas de la suerte y dar una bienvenida pausada y relajada al 2023.

Esta iniciativa cuenta con una campaña de comunicación nacional donde los habitantes del pueblo de Bubión se han convertido en protagonistas. Para Antonio Garrido, director de marketing de La Casera, es un orgulloso poner en marcha esta propuesta: “Nos encanta que La Casera pueda abanderar una iniciativa tan necesaria en los tiempos que vivimos, en los que las prisas nos impiden disfrutar con calma los mejores momentos con los nuestros”.

Por su parte Eva Bedón, directora creativa de la campaña, ha explicado que con esta acción la marca traslada a Navidad esa filosofía de vivir la vida como en verano: despacio. “Las campanadas son el reflejo de cómo vivimos todo el año: atragantados por las prisas. Si alguien podía hacer un llamamiento para disfrutar el momento fin de año de forma más relajada pero respetando la tradición es La Casera. Creativamente fue un reto introducir en invierno un producto que lleva el verano en su propio nombre, pero brindar con Tinto de Verano La Casera por el nuevo año demuestra que hay cosas que pueden cambiar”.

La campaña ha sido rodada de forma íntegra en Bubión, Granada, durante dos días, por la productora Carne al Corte y las campanadas se emitirieron en directo desde Bubión el 31 de diciembre en el canal de Youtube de La Casera.

La agencia de medios es Wavemaker.